Pelea en pista y en los garajes de Red Bull

Ciudad de México.- La escudería Red Bull de Fórmula 1 está teniendo el mejor inicio de temporada en cuanto a puntos y a resultados se refiere en su historia. Tanto Max Verstappen como Sergio Pérez han conseguido las victorias en las tres primeras carreras del calendario. Queda mucho por delante, y ambos pilotos son los máximos favoritos al título según las apuestas de Fórmula 1.

En este micro parón de prácticamente un mes luego del GP de Australia, debido a que la FIA no encontró reemplazo para el cancelado GP de China, muchas cosas se han estado diciendo en torno a lo que sucede en el interior de la escudería con base en Milton Keynes.

Muchos han estado especulando sobre lo que ocurre entre los dos pilotos, y si el buen compañerismo que existía en los primeros años del mexicano se ha roto definitivamente, o por lo menos, ha cambiado.

En recientes declaraciones de Checo, ha comentado que el respeto entre ellos sigue intacto, y que las aproximaciones de los dos garajes del equipo son un tanto distintas a las de temporadas anteriores. Pero que no hay ningún problema entre los pilotos.

Esto de cierta manera se puede confirmar tras ver el cambio de actitud tanto del mexicano, como de su cuerpo de ingenieros y mecánicos, que han conseguido hacer las paradas en pits más rápidas, además de poner las estrategias de carrera donde deben estar.

Sin embargo, hay evidencias que sugieren que todo lo bueno que se dice está todo, sea casi casi de la boca para afuera. Los gestos y las actitudes de Verstappen y de su familia con respecto a la victoria de Pérez en Arabia Saudí, ponen de manifiesto cierta incomodidad o inconformidad en los resultados, tal y como se pudo comprobar a través de la Betway App.

Ya sea que todo esto se refiera a la victoria como tal, o a la manera en que desde el equipo están manejando las cosas, lo cierto es que podemos notar también un cambio de actitud en Max con respecto al año pasado.

Recordemos que todo comenzó a desajustarse luego del GP de Brasil, con la desobediencia de Verstappen a una orden directa del equipo y que, a la postre, impidió que Sergio consiguiera el subcampeonato de pilotos.

Ya todos hemos escuchado la comunicación por radio entre el neerlandés y su ingeniero de carrera, Giampiero Lambiase, donde hace alusión a eventos que ocurrieron antes y que le llevaron a “mantenerse firme en su decisión” de no apoyar de ninguna manera a su compañero.

Luego, los rumores indicaron que se trató de lo que sucedió en el GP de Mónaco, cuando los Verstappen, sí, todos, aseguraban que el piloto azteca había chocado su auto en la Clasificación para dejar sin oportunidad a los demás y quedarse con la Pole Position.

Cuando las cosas se pusieron más intensas, la FIA intervino, de cierta manera, asegurando con evidencias de video y telemetría, que aquel incidente no tuvo absolutamente nada de intencional. Pero el daño estaba hecho.

Es por todo esto que las tensiones se sienten mayores al interior de Red Bull, sobre todo cuando el Dr. Helmut Marko hace declaraciones que van totalmente en contra de lo que dicen los pilotos. Ni siquiera Christian Horner ha podido establecer una línea dentro de la escudería, por lo que parece que tendremos una temporada muy interesante y movida tanto en la pista, como en los garajes de Red Bull.